Clary Fray es una adolescente normal y corriente de Brooklyn hasta que una noche, y en eventos muy extraños conoce a un chico lleno de tatuajes llamado Jace. Jace no tiene nada de común y corriente, es un guerrero mitad humano, mitad ángel conocido como cazador de sombras.
Es escaso a una buena dirección, donde los movimientos y ángulos son malos, realmente malos. Con un exceso de Clichés... Creo que resumir la película como en el párrafo anterior, hará que mi crítica sea más corta de lo esperado. Eso sí, si vas a ver la película, entonces mírala, pero con la condición de que no hayas leído el libro primero. Claro, que comparar un film con la literatura está mal, pero cuando se es del mismo es inminente.
Sinceramente, le tenía fe, (muy poco, pero le tenía), y si, esperaba más, al final no fue más que otra decepción del año, en donde una apuesta pretende quitar de lugar a lo que fue (o es) Twilight. Y parece que habrá que acostumbrarse a esto, pues desde que esa saga vampirezca acabó (de momento), más apuestas al estilo juvenil de muy mala calidad. Dejando en fuera a Los Juegos del Hambre, Harry Potter y lo que pretende ser El Juego de Ender. Quienes si me lograron tapar la boca.
Calificación Final: 3/10
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